miércoles, octubre 11, 2006

Poema nahualt

Nadie viene a la tierra para quedarse.
Nuestros cuerpos son como los rosales,
sus pétalos se marchitan y mueren.
Pero nuestros corazones son como la hierba en primavera,
viven para siempre y reverdecen eternamente.


Antiguo poema mejicano
en la lengua nahualt

1 comentario:

Anónimo dijo...

Que interesante, descubrí este espacio por casualidad, pero creo que no hay casualidades sino causalidades..VIVIR es maravilloso, que poema tan hermoso