martes, octubre 19, 2010

Sobre el cielo nocturno

Desde siempre la humanidad ha mirado el cielo nocturno y ante la magnitud del universo se ha planteado profundas y trascendentales cuestiones. Precisamente pensamos que de la contemplación del cielo estrellado nació la ciencia. La filosofía, las matemáticas, la geometría, la religión, etcétera, tuvieron su origen en la profunda meditación a que invita la contemplación de un cielo oscuro y lleno de estrellas.

Saberse situar en la dimensión humana gracias a la contemplación del universo es un ejercicio más que saludable. Sin embargo, actualmente la ausencia del cielo estrellado desde nuestras ciudades nos instala en la mediocridad de una existencia poco trascendente ajena a nuestro verdadero entorno cósmico. 

Viviendo en una gran ciudad, los estímulos para meditar sobre nuestra propia existencia quedan prácticamente relegados a un segundo término al no poder contemplar el firmamento como lo hicieron nuestros antepasados. [...] Cabe invitar a las nuevas generaciones a sentir el vértigo de la inmensidad y a maravillarse ante el firmamento estrellado, como una parte más del medio ambiente que debemos legar incólume.

Josep M. Trigo Rodriguez
astrofisico
  

1 comentario:

Gaia dijo...

http://www.elpais.com/articulo/sociedad/Contaminacion/luminica/plena/crisis/elpepusoc/20101018elpepusoc_9/Tes